Mis habilidades para la clarividencia son nulas y se las reservo a aquellos cuyo trabajo depende de ellas. Veremos, llegado el momento, si las decisiones tomadas han sido las acertadas y si nuestros dirigentes estuvieron a la altura de las circunstancias. Ayer me vi obligado a salir a la calle después de mucho tiempo encerrado en mi casa. Tal vez usted, querido lector, se pregunte el motivo por el que le cuento esto o tal vez piensa que me debería …